Alejandra Carvajal es payasa, comunicadora social, y está incursionando desde hace un año en el stand-up comedy, su historia de emprendimiento nació con Copito, un personaje del clown que como ella dice “es el resultado de una historia de amor”. Son dos mujeres íntimamente conectadas y similares pero que con tan solo una nariz roja y un vestido de colores le da el super poder de ser esa parte libre y sin miedo a ser juzgada, fuego, espontaneidad y color sin el temor de encajar en los estereotipos construidos por la sociedad.
Su proyecto de ser una clownmunicadora surgió en el año 2016 de forma inconsciente, debido a El Noticopi un proyecto que surgió cuando atravesaba su práctica universitaria, el cual se convirtió en un paso definitivo que transformó su idea a lo que es hoy en día. Sin embargo y debido a la carga laboral que representaba trabajar como payasa y comunicadora al mismo tiempo no fue tan sencillo atravesar toda esta evolución.
Más tarde llegó su graduación y con ella el dilema y la necesidad de tener que decidir entre la Comunicación Social, o ser payasa de profesión, su decisión de vida fue ser payasa, pensando en su bienestar emocional y en perseguir su pasión y aquello que la hacía soñar, pero con la presión de dejar de lado su profesión.
Además el universo parecía enviarle señales y para entonces, el momento fue oportuno, pues cuando su amor por el arte circense crecía, la ciudad de Medellín estaba teniendo una oleada de artistas que se tomaban las calles de escenarios para deslumbrar con sus habilidades, compartir con el mundo el arte, y para llenar de magia la rutina veloz y agotadora citadina.
Para ese momento Alejandra con su corazón en el arte y su mente en la comunicación, se iluminó al pensar que no había un registro audiovisual que convocara al público, o anunciara este tipo de eventos del sector del circo contemporáneo de la ciudad y decidió hacer un medio de comunicación llamado “El Noticopi” en el 2016, un canal en Youtube donde plasmó su idea inicial, más tarde en el 2018 se da cuenta de que quería extender su proyecto siendo una marca “sombrilla” pensada en una estrategia flexible que puede verse reflejada en otros proyectos, bien una revista, una escuela y proyectos sin límites de su mirada ampliada.
Un año después y una vez su marca estaba consolidada, se presentó al concurso Mujeres Jóvenes Talento en la categoría de Emprendimiento, siendo ganadora de esta, momento en el que realmente comenzó a creer en sí misma y en su empresa, así el que ella creía que era nada más que un sueño se convirtió en una idea de negocio, detalle que descubrió hasta el momento en que estaba categorizando su proyecto entre las etiquetas de arte, comunicación o emprendimiento en el marco del mismo concurso.
“Crear su propio universo y su propia manera de ver la comunicación y el clown escuchando a su alma y siguiendo a su corazón” son los objetivos de esta soñadora. Su misión es “unir las herramientas creativas, artísticas y lúdicas del lenguaje del clown, con las herramientas escritas, digitales y audiovisuales de la comunicación social, para crear servicios clownmunicativos que aporten a la transformación de la realidad y a la consecución de objetivos comunicativos empresariales y comunicar jugando.” y Mientras sonríe afirma que su visión a futuro es tener una agencia de “noticias payasisticas”.
Actualmente está desarrollando un proyecto con niños y niñas del barrio Blanquizal, llamado “Reporteritos Clownmunicativos” soñando con payasas y payasos que informen sobre eventos de ciudad. Sueña ir con Noticopi como payasa reportera a cubrir eventos masivos de ciudad, y que sea vista como una periodista de nivel profesional en el personaje de un payaso, esa figura tan poderosa de la comunicación que permite la expresión de las ideas, emociones y situaciones desde la risa.
Alejandra invita a las mujeres y niñas soñadoras que quieren atreverse, que han pensado que sus ideas no son suficientes, que sus sueños no son viables económicamente, o que se enfrentan con adversidades en el camino, a que más allá de que una idea sea exitosa o tenga reconocimiento, se aferren a su sueño, a ese ideal de felicidad al que siempre quieren volver aunque el mundo exterior se torne difícil, a crear su propio altar de fuego interno para que nadie apague sus ganas de crear.
Escucharse, trabajar en su salud mental y tener espacios de contemplación, diálogo interno, y todas las herramientas humanas que se acerquen al autocuidado, de esta manera trabajando en ti misma primero, se logra un trabajo auténtico, real, direccionado a tu ser.
“Recuérdate todos los días, cada segundo, respiración tras respiración que eres increíblemente valiosa, y que tu camino es maravilloso” .
Copito y Alejandra trabajan a diario para lograr sus objetivos, para hacer sus sueños realidad, y aunque no pueden asegurar el triunfo de su proyecto, pueden asegurar que si siguen soñando y construyendo juntas siempre habrá una sonrisa y quizá ahí lejos de las apariencias, es donde se encuentra el éxito.