La decisión de la corte constitucional ha tomado por sorpresa a un país tradicionalmente conservador y donde el catolicismo prima.
Esto significa que los abortos en las primeras 24 semanas de embarazo serán despenalizados, el modelo será mixto y seguirá teniendo en cuenta las tres causales que ya se tenían: malformación del feto, salud mental y física de la mujer en riesgo y cuando el embarazo es producto de una violación, de acuerdo con las investigaciones de Causa Justa, una coalición de grupos que trabajan por el derecho al aborto. En Colombia se abren alrededor de 400 casos anuales en contra de mujeres que deciden interrumpir su embarazo, o contra quienes realizan el procedimiento.
La Fiscalía General tiene una cifra de 346 mujeres sentenciadas en 13 años entre ellas 85 son menores de edad, la mayoría en situación de vulnerabilidad, y quienes se han visto enfrentadas a delitos sexuales; violencia intrafamiliar o condiciones de precariedad económica y falta de acceso a educación sobre derechos sexuales y reproductivos”.
Según el Ministerio de Salud colombiana los abortos ilegales causan unas 70 muertes al año, se espera que con la decisión tomada las mujeres tengan acceso y un trato digno en su proceso, este servicio será brindado sin obstáculos en las EPS dando paso a una reducción de la clandestinidad.
Una de las demandas que exigían la despenalización del aborto como delito en el código penal fue hecha por el movimiento Causa Justa conformado por más de 90 organizaciones y más de 150 actores clave, quienes tienen como objetivo que «ninguna mujer vaya a la cárcel por decidir sobre su cuerpo; y que las profesionales de la salud puedan ejercer su oficio sin criminalización ni estigmas». Concediendo así, libertad y autonomía de las mujeres para decidir sobre sus cuerpos y proyectos de vida, características fundamentales de una ciudadanía plena».